jueves, 30 de octubre de 2008

Unas pocas líneas

El luthier celestial nos recuerda que somos instrumentos. Como tales no manejamos la creación a voluntad. Cuanto más lo intentamos, más rígida se vuelve nuestra madera, más ásperas nuestras cuerdas. La historia nos golpea, y es preciso desenrigidecernos para poder vibrar libremente, dejar que la música de la realidad se propague a través nuestro, ser su resonador, su herramienta de cambio.
El luthier celestial me sugirió que unas pocas líneas estaban bien para empezar.

jueves, 16 de octubre de 2008

Ejercicio 6/09/08

El ruido de una gota de lluvia rechoncha que estalla, y otra, y otra. Ellington en su piano, en el eco de una grabación. El carrito que se descarriló en el Italpark. La cabeza de un fusilado contra el suelo, imperceptible para los oídos aturdidos de los disparos. Una trompeta con plasticola cagando notas pegajosas. Algún recuerdo de un suceso terriblemente sin importancia.

Ellinton descarrilando de su piano contra el suelo. El Italpark en un recuerdo con plasticola. El ruido de una trompeta contra las gotas. Un fusilado de un carrito grabado. Un oído percibe notas terriblemente sin importancia.

Recuerdo cuando el piano de Ellington disparaba contra un oido imperceptible...

etc.